Comentarios de cine "Hostal II"

Son 3 los comentarios que iran seguidos, este es el segundo el de Hostal II película que tambien tuve la oprtunidad de ver y además de asco y una verdadera lástima por las personalidades de los diversos personajes, mi profesor tambien tiene su opinión la cual compartire con ustedes a continuación:

Hostal Part II

lanacion.cl Sábado 30 de junio de 2007

Por JOBLAR

Un frío análisis semiótico nos pone frente a la trama de un cuento de hadas. ¿O no se han dado cuenta ustedes que esos cuentos "para niños" – como Pulgarcito o Barba Azul – están repletos de sangre y horror?¿O es cuando los leyeron o se los contaron, no iban adivinando todo lo que iba a pasar, mientras se asustaban cada vez más y más?

Eli Roth vuelve a las andadas, siempre bajo la protección de Quentin Tarantino, a quien homenajea con algunas escenas de Pulp Fiction, emitidas en un televisor del siniestro hostal.

Como en las producciones terroríficas de los años '40 y '50, es la música la que indica quiénes son los buenos y quiénes los malos. Baste como ejemplo la sobreactuada expresión del recepcionista cuando pide los pasaportes y procede a escanearlos. Luego seguirá el remate de esos juveniles cuerpos femeninos a través de Internet.

Todo el horror de la siniestra organización, que tortura y asesina impunemente en Eslovaquia (¿alguien querrá ir a ese país ahora como turista?), es descrita por el único sobreviviente de la primera parte al inicio de la continuación de esta saga. Lo que sigue son lugares comunes, que nos recuerdan que no se debe confiar en extraños, tomar bebidas alcohólicas en exceso o aceptar paseos en barca con un tipo que se acaba de conocer.

Esta vez las víctimas son mujeres, que corresponden a otros tantos estereotipos: la "pavona", que se suelta inexplicablemente en la primera ocasión; la rubia desenfrenada, al estilo Britney Spears y Paris Hilton; la millonaria con suficiente preparación como para luchar contra una ley básica del capitalismo: "el que tiene más dinero que los otros decide quién vive y quién muere".

Tampoco tienen profundidad psicológica los jefes de la organización, que corresponden a maquetas de verdugos nazis. O la de los millonarios torturadores: uno, entusiasta y drogadicto, se arrepiente y lo paga caro; el otro, timorato, termina por comportarse como un psicópata esquizofrénico, que cree estar vengándose de su esposa.

La suma de tantas obviedades no constituirá un óbice para los amantes del gore y del splatter. Entre las secuencias difíciles de olvidar está la castración de un pene, con sus respectivos testículos, que es arrojado a perros furiosos. Y la otra (inédita) de una mujer mayor que se baña en la sangre de una joven colgada sobre ella, mientras – cual parca de catedral barroca – la cercena con una guadaña.Y la secuencia final, que une venganza a niños delincuentes. El espectador ya los conoce, pero no se imagina qué usarán como balón después que la bella señuelo reciba su merecido.

Para los que gustan de los cameos, está la voluptuosa Edvige Fenech (que participó en este tipo de películas en los años '70) y el director Ruggero Deodato (que interpreta a un antropófago en recuerdo de su Holocausto Caníbal).

Hostel: Part II. USA, 2007